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Roberto se acercó explicando el alivio (?) que le producía haberme conocido, por fin, agregando que era una suerte, para mí, haberlo conocido a él en su más agraciada faceta de
lustrador de parqué. Yo me disculpé y entre risa interna le dije: "permiso, me voy a comprar tomates".
En realidad, sencillamente fui a tualé.
nota al pie: si Ud. desea leer la versión original, PIDAMELA.
2 comentarios:
A los tomates! las papas! batatas baratas! bien fresssquito el pejerilllll!Todo pa usté, pa lo que guste pedir.
(paaabre Jules...)
Beso!
Fer.- (tu compañerito...ése de la escuela de la redasión)
jajajaja... te adoro.
Nooo, a vos no Feeer, je, tranquilo.
A vos, jajajaja, sos brillante Ceasecas.
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